La historia de una empresa familiar siempre va ligada a una familia, es el caso de Moventia. El espíritu emprendedor es un valor intrínseco en las empresas familiares de éxito. Siempre hay un emprendedor que consigue convertir su idea inicial, llena de incertidumbres, en un proyecto ilusionante y una realidad, con posibilidades de continuar generacionalmente a lo largo de años.
Este ha sido el caso de Moventia. Miquel Martí Adell fue el emprendedor, que hizo realidad su idea inicial y convirtió su sueño en una empresa. Más adelante, y con el paso de los años, supo trasladar sus valores -el rigor, el trabajo, el compromiso, el coraje, la perseverancia, la bonhomia- a la siguiente generación. Este ha sido el ADN y los valores permanentes del grupo generación tras generación y una de las claves de su éxito empresarial.
Y es que lo que nació en 1923 de la mano de Miquel Martí Adell con un solo autobús urbano en Sabadell, hoy es, tres generaciones posteriores, una gran empresa consolidada formada por una familia de más de 2600 colaboradores.
Durante 2014 se ha celebrado 90 años de historia. Una historia que se puede resumir en 5 etapas:
La primera: 1923-1939: Miquel Martí Adell, funda el grupo:
En esta primera etapa la empresa empieza a crecer gracias a la propia evolución de la ciudad de Sabadell y de sus alrededores. Además, con el primer asentamiento en la ciudad de Barcelona, la empresa logró tener 15 autobuses y unos 50 trabajadores en solamente 13 años de existencia. Esta evolución positiva se vio truncada por la Guerra Civil con la confiscación y colectivización de la empresa al ser un servicio público.
La segunda: 1939-1950: La reconstrucción y el renacimiento de la empresa:
Una vez terminada la guerra, esta etapa supone, básicamente, el renacimiento de la empresa recuperando parte del material incautado; sin olvidar las dificultades que la economía autárquica de España comportaba debido a la escasez de combustible y inexistencia del mercado de autobuses.
La tercera: 1951-1979 El expasión del grupo:
Con la segunda generación al frente de la compañía, se inicia la primera expansión del grupo: las ciudades crecen, se empieza a vivir el desarrollo industrial y el autobús se convierte en un bien de primera necesidad ya que resuelve la movilidad generada por la evolución económica de las ciudades y su entorno metropolitano. Además, el grupo crece fuera de Cataluña y presta el servicio urbano de las ciudades de Córdoba y Zaragoza entre otros.
Al mismo tiempo, en esta etapa se inicia la diversificación de la empresa en el sector de la distribución de automóviles, comenzando con una pequeña concesión Renault en Sabadell.
La cuarta: 1980-1990 Nueva parada y fuerte recuperación:
Tras perder Autotransportes Martí, la empresa madre de transportes en Sabadell, y los urbanos de Córdoba para la municipalización de los servicios públicos debido de las primeras elecciones tras el franquismo, la empresa renace de las manos de la tercera generación. En 1985 se fusionaron Autotransportes Martín SA y Renom Buss, que permitió ofrecer una nueva dimensión a las dos empresas en el sector del transporte de viajeros por carretera y, al mismo tiempo, poder estar presentes de manera importartant en este sector en Cataluña . Comercialmente se llamó Sarbús.
La quinta: 1991-2014 La gran expansión del grupo
En esta etapa se lleva a cabo la mayor expansión del proyecto empresarial. Como hechos más destacables en la rama de transportes, se constituye Transportes Ciudad Condal (TCC), se compran Empresa Casas y Sarfa. Además se les adjudica como operador del Tranvía de Barcelona y por la explotación del servicio de Bus Turístico de Barcelona.